Mickey Mouse no ayudará a comer de manera saludable a los niños


La industria alimentaria sigue con su particular sentido de la autorregulación y así encontramos la reciente decisión de una empresa española en  invertir en la compra de los derechos de reproducción del icono infantil de Disney en paquetes de comida procesada con el objetivo de dirigir su mercado a un grupo de edad que no tiene capacidad de comprender que los gustos que los vendedores de aperitivos promueven , alteran las estructuras cerebrales que deben regular la ingesta y la saciedad, pudiendo condicionar  rechazo a los alimentos saludables y naturales, y ejerciendo una facilidad, científicamente demostrada , en adquirir malos hábitos alimentarios y la posible instauración futura de obesidad infantil.

Con las terribles cifras de sobrepeso infantil, el hecho de insistir en asociar productos no saludables y con sabores intensos, con imágenes que susciten en los niños un deseo irrefrenable de compra y posterior ingesta, es un obstáculo más en el trabajo de miles de sanitarios y familias que luchan cada día por ofrecer a nuestra infancia una alimentación saludable. Desde el nombre del producto, el sello de Disney, la tipografía de las letras, la forma de los elementos comestibles, la imagen de Mickey por delante y por detrás del paquete, el juego que está en el anverso y el regalo que han metido dentro, todo, absolutamente todo ( son 8 ítems)  empuja, arrastra y conmociona literalmente el cerebro del  niño que ve el paquete, provocando una lógica respuesta de deseo en su inmaduro sistema nervioso.

Por si fuera poco el tirón comercial del ratón más famoso de la historia, regalan una sorpresa en cada envase, con lo que hay un doble  reclamo publicitario.  Vergonzoso. Todos los pediatras, médicos de familia, dietistas, enfermeros,  psicólogos , y en general, cualquier familia que se preocupe por la alimentación de sus niños, deberíamos exigir de una vez que la industria alimentaria no tenga tan fácil el ofrecer productos no saludables a los niños. En el año 2009 ya se intentó mediante la redacción de un punto especial en el anteproyecto de ley de seguridad y nutrición , en el apartado que hacía referencia a la publicidad infantil, evitar la entrega de un premio u obsequio vinculado a la venta de un producto ( 2/12/2009 suplemento Tendencias de La Vanguardia), pero la poderosa Big Food lo impidió. Habrá que volverlo a intentar.











 

Comentarios

Entradas populares de este blog

INFORME SOBRE LA OBESIDAD INFANTIL EN ESPAÑA 2021-2022

Todos mis artículos (41) en Eroski Consumer