Comer y masticar fruta, mucho mejor que beberla.

 

 

Hoy mismo, Eroski Consumer ha publicado un artículo que está teniendo gran aceptación pues es un tema en el que se han generado en los últimos años, controversia y rechazo, pues muchas personas no ven nada claro que beber un vaso de unos 200-250 ml de zumo recién exprimido, cada día, no sea una buena idea desde el punto de vista nutricional.  Grandes y prestigiosos dietistas-nutricionistas, referentes nacionales (Julio Basulto, Juan Revenga  y Aitor Sánchez),  ya han hablado varias veces de este tema, siempre con acierto y erudición apoyando con todo tipo de estudios sus textos.

En mi trabajo, intento ampliar y  ensanchar el camino del conocimiento en este vitamínico tema, ofreciendo a los lectores una visión anatómica y fisiológica de los procesos digestivos que marcan las grandes diferencias que existen entre masticar fruta o beberla.  Os hago un listado de alguno de los artículos o intervenciones en medios de mis compañeros:

1. Beber zumo de fruta no equivale a comer fruta : Juan Revenga
2. Mejor fruta entera que un zumo: Julio Basulto
3. El zumo de fruta no es fruta, ni siquiera si es casero: Julio Basulto
4. Cuando hacemos zumo nos quedamos sin la fibra de la fruta: Aitor Sánchez

En el artículo hago un repaso a varias fases de la digestión de los alimentos comenzando por la salivación y la masticación que se inician en la boca, a la vez que comienzan a mandarse señales al cerebro y a diferentes secciones del aparato digestivo para que se vayan preparando para una correcta y "tranquila" absorción de los distintos componentes que tienen las frutas.

Como me gustan mucho las imágenes, os pongo dos de mi archivo: la primera, pelando yo mismo una naranja con el propósito de no romper la piel y sacarla enterita, como solíamos hacer en mi infancia (no sé si eso en la sociedad actual se lleva o no...pero sospecho que no); la segunda, que remata esta entrada, con la naranja, ya cortada en pequeñas pirámides y lista para su consumo. Seguro que vuestros hijos, al ver estas preciosas formas, se tirarán a por ellas, masticando con alegría y fruición. Buen provecho.

Comentarios

Javier Santos javisantos36@gmail.com 193.147.171.209

Una de las creencias que en mi opinión va a costar más trabajo de eliminar. Demasiado implantado en el imaginario colectivo, y demasiado presente en cualquier vitrina de supermercado. Y muy cómodo para dar a los críos. Por cierto, lo de pelar la naranja sin romper la piel es demasiado fácil,  ¿no? Yo lo hacía con las manzanas, ¡hacer una trompa de elefante!

Carlos Casabona tueligesloquecomes.com ccasabona2@gmail.com 83.247.136.48

En respuesta a Javier Santos. Así es, Javier, son 30-40 años de publicidad y consumo aceptado por todos nosotros. Ahora, la tendencia es imparable pero nos va a costar unos 10-20 años compensar. Según qué naranjas era más difícil que otras…no te pienses. Muchas gracias por tu visita.